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Cuando Estados Unidos terminó de retirar sus fuerzas de Afganistán a fines de agosto de 2021, muchos ciudadanos afganos temieron lo que podría suceder si el ejército estadounidense ya no estuviera allí para protegerlos. Esto provocó una avalancha de cientos de miles de refugiados afganos, muchos de los cuales buscaron refugio en los Estados Unidos. Sin embargo, después de llegar a Estados Unidos, se han visto envueltos en la burocracia, luchando por obtener el estatus legal que necesitan para permanecer en el país.
¿Qué pasó en Afganistán?
Estados Unidos invadió Afganistán por primera vez en 2001, poco después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. Si bien esto originalmente tenía como objetivo atacar a los talibanes y capturar a Osama bin Laden, el autor intelectual de los ataques, finalmente se convirtió en una ocupación militar prolongada. Como resultado, muchos afganos comenzaron a depender de la estructura creada por los estadounidenses, y varias personas hicieron carrera trabajando con las fuerzas militares estadounidenses.
¿Por qué tanta gente decidió huir de Afganistán?
La avalancha de refugiados afganos fue el resultado de la huida de personas del país después de que Estados Unidos acordó retirar sus fuerzas de Afganistán. Esta reducción permitió el regreso de los talibanes, una perspectiva que asustó a muchos ciudadanos afganos que temían lo que podría hacerles un gobierno talibán. Algunos eran traductores, u otros que colaboraron con los Estados Unidos en su misión, mientras que otros eran defensores políticos que temían la persecución sin la protección estadounidense. Otros eran simplemente mujeres u otros grupos marginados, que temían un regreso de la opresión de los talibanes sin el ejército estadounidense allí para detenerlos.
¿Qué problemas han enfrentado?
Como parte de sus esfuerzos para ayudar a la esperada ola de refugiados afganos, los expertos de la Casa Blanca y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) alentaron a las personas a solicitar la libertad condicional humanitaria. Esta era, creían, una forma de ayudarlos a evitar los problemas a menudo asociados con la solicitud de Visas Especiales de Inmigrante (SIV) o el Programa de Admisión de Refugiados de EE. UU. (USRAP). Sin embargo, en lugar de ayudar, esto creó una acumulación masiva de solicitudes de libertad condicional humanitaria de refugiados afganos, con más de 39,000 solicitudes aún esperando ser procesadas a partir de enero de 2021, y cerca del 80% de las solicitudes procesadas fueron denegadas.
¿Qué pueden hacer los refugiados afganos?
Cualquier refugiado afgano, o cualquier otra persona que tenga dificultades para lidiar con el sistema de inmigración de los Estados Unidos, debe ponerse en contacto con un abogado de inmigración lo antes posible. Pueden ayudar a explorar otras opciones legales y ayudar a desenredar la burocracia para que sus casos se procesen lo más rápido posible. Cuanto antes llame, antes podrán ponerse a trabajar en su caso.
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